Durante el parto conocí lo que es un secuestro, conocí la desesperación de no poderme mover, de que mi voz no fuera escuchada, conocí la tortura de estar más de 37 horas en labor de parto donde nunca terminé por abrir correctamente para dar a luz después de 3 bolsas de oxitocina.
Aún cuando llegó la doctora después de que lograron bajar la fiebre que me tenía temblando le pedía lagrimas que me hiciera una cesárea. No me dejo decidir, me hizo tener un parto natural cuando todo indicaba que no era posible.
Las consecuencias fueron graves, mi niño estuvo a punto de perder el movimiento en un brazo, yo quede con incontinencia urinaria y rectal. Aún por hoy sufro de Estrés Post-traumático por esta horrible experiencia y les puedo asegurar que el cuerpo de una mujer si esta hecho para dar a luz pero no de esta manera.
Me he unido a un grupo de mujeres que como yo hemos pasado por este tipo de experiencias para hacer consciencia de que estas prácticas no son normales.
Gracias a una organización Birth Monopoly bajo el liderazgo de Cristen Pascucci nos estamos uniendo para recaudar fondos para la realización de un documental que ayude a que nuestra voz se escuche ¡No más violencia obstetricia! ¿tienes una historia similar? ¿conoces a alguien que la tiene? hazle llegar esto.
Si quieres ayudar a esta causa da click aquí: ? https://buff.ly/2JSbPo3